Origen de Aragonés

Origen Aragonés

Como su nombre indica, este noble y antiguo linaje es originario de Aragón. Muchos autores la incluyen en su nobleza, aunque su origen es muy diverso, ya que diferentes casas florecieron de forma confusa y desde antiguo en Aragón, Navarra y Cataluña.

Mosén Jaume Febrer cita en sus Trovas: "Juan Aragonés pintó en su escudo de plata la cruz empoderada, que usaba la religión templaria. Con estas sagradas insignias, tu padre hacía tributar al rey a sus enemigos. Venía de Jaca a conquistar Valencia , y con el esfuerzo de sus valientes tropas entregó Alcoy y Agullente. Después se dirigió a Villajoyosa, y después de causar grandes daños a los moros de Calpe y Altea, se dirigió a Alicante, donde descansó placenteramente. p>

Martín de Viciana cita a Mosén Gaspar Aragonés de Puigmoltó y a su sobrino Gaspar, afirmando que eran caballeros de guerra en la ciudad de Alicante, donde vivían. Añade que su nobleza fue confirmada el 8 de octubre de 1551, por sentencia del General Bayle de Valencia.

En Navarra tenían casas solares en la ciudad de San Adrián, propiedad de Bartolomeo Aragonés; dos en la ciudad de Artajona, propiedad de Johan y García Aragonés, hermanos, y de Pedro Aragonés, hijo de Andrés Aragonés, mencionado en la Fogueración y Monedaje de 1329; en Guendulain, de la Merindad de Sangüesa, propiedad de Yenego Aragonés; dos en la ciudad de Estella, propiedad de Johan Aragonés y Semeno Aragonés, y otro en Funes, de la Merindad de Estella, propiedad de Sancho Aragonés, mencionado en la Fogueración de 1366.

En la Fogueración catalana de 1553 se mencionan casas en Santa Coloma de Gramanet y en la ciudad y municipio de Moya (Barcelona); en la ciudad de Tortosa, Riudecañas, Dosaigues, Benisanet, Miravet, Botarell, Quadra deis Tescals, Las Irlas, Cornudella, Borjas del Campo, Montroig, Reus y Cambrils (Tarragona) y en Balaguer, Guissona, Lleida ciudad y Tornabous (Lérida).

Los aragoneses también emigraron a Castilla. De una rama que tenía sede en Fontiveros (Ávila) procedieron Hernando y Martín Aragonés, que fueron ennoblecidos en la Real Chancillería de Valladolid en 1550 y 1570, respectivamente.

Otra rama se instaló en la ciudad de Cáceres después de que surgiera José Aragonés, conocido como Señor de Cáceres, en 1715.

Se establecieron en Fortanete (Teruel), Fontiveros (Ávila), Soria, Carmona (Sevilla) y México.

Álvaro Aragonés, natural de Córdoba, en 1528, y Miguel Aragonés de la Vega, nacido en Carmona (Sevilla), probaron su nobleza ante la Real Chancillería de Granada en 1552.

Cargos en el Santo Oficio de la Inquisición los ocuparon: Agustín Aragonés y López, de Campo Real (Madrid), médico de la familia real, como oficial y ministro en Toledo, 1723, y su esposa María de Pereda Tordesillas , natural de Madrid; Lorenzo Aragonés y Zúñiga, de Madrid, como reportero en Toledo, 1716; e Isabel Aragonés Diest, de Longás (Zaragoza), como esposa de un oficial en Zaragoza, 1676, y Pedro Aragonés, como familiar, y su esposa María de Abengozar, natural de Herencia y vecina de Villaharta, 1628.

Miguel Aragonés y Castellot, natural de Fortanete, que fue oficial superior del secretario de Cámara del Infante Piadosísimo don Pedro, ingresó en Caballero de la Orden de Carlos III el 16 de noviembre de 1793.

Jaime Aragonés y Gramage, natural de Fuente la Higuera, era miembro de la Orden de Montesa desde 1605 y fue Rector de Salsadella y Chert.

A Manuel de Aragonés se le concedió la nobleza en 1798 porque su esposa, Vicenta Barba, era amante del Infante Don Pedro.

Cayetano Aragonés Picó fue Guardia de Marina en 1818.

Entre los miembros que ingresaron en la Orden de San Juan de Jerusalén se encuentran: Fernando de Aragonés, natural de Ontiveros, en 1587; Diego Aragonés y de la Cueva, 1588; Fernando Aragonés y de la Cueva, de Ontiveros, 1588; Fernando Aragonés, 1589; Diego Aragonés de la Cuba, natural de Ontiveros, 1636; Diego, Francisco y Hernando Aragonés, 1649; Juan Matías Aragonés Bueso, natural de Fortanete, presbítero y Prior de Fortanete, 1657, y Lupercio Aragonés Tonda, natural de Fortanete, Presbítero y Prior de la Iglesia Parroquial de Fortanete de la Orden Magistral de Aliaga, 1645.

Entre las personas que se incorporaron a los Colegios de San Ildefonso y Menores de Alcalá se encuentran: Agustín Aragonés, de Villa del Campo (Toledo), 1697; Lorenzo Aragonés, de la Casa de Uceda, 1716; Pedro Juan Aragonés, de Fresneda, 1702; Martín Aragonés de Lemos, de Ontiveros, 1595 y 1602, y Julián Aragonés y Rebollo, de Irueste, 1826 y 1831.

Fuentes:

- Autor1, Título del libro, Editorial, Año.

- Autor2, Título del libro, Editorial, Año.

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La investigación del apellido Aragonés nos lleva a explorar diversas facetas. El estudio etimológico nos revela pistas sobre su significado y evolución a lo largo del tiempo. La geografía juega un papel clave al analizar la distribución inicial de Aragonés y cómo se ha expandido a lo largo de las generaciones. Pero no podemos dejar de lado el contexto histórico y cultural que rodea el origen del apellido Aragonés, ya que nos ayuda a comprender mejor sus raíces y la historia de quienes lo llevaron.

Aragonés y sus raíces

Los apellidos, como los conocemos en la actualidad, tienen sus raíces en una vasta gama de orígenes y significados, representando la historia, la cultura y las tradiciones de diversos pueblos y regiones alrededor del globo. El origen del apellido Aragonés encapsula toda esa diversidad. En sus inicios, Aragonés, al igual que la mayoría de los apellidos, no era fijo ni hereditario, sino que se otorgaba por razones prácticas o simbólicas. A medida que el tiempo pasaba, el apellido Aragonés evolucionó hacia prácticas hereditarias que ahora son parte esencial de la identidad de aquellos que llevan el apellido Aragonés.

Origen del apellido Aragonés desde una perspectiva histórica y cultural

Los apellidos son parte fundamental de la identidad de una persona, y cada uno cuenta una historia única y fascinante. En el caso del apellido Aragonés, su origen puede estar ligado a tradiciones ancestrales, migraciones históricas o incluso a leyendas familiares transmitidas de generación en generación.

Si nos adentramos en el misterio del significado de Aragonés, podemos descubrir un fascinante viaje a través de la historia de la humanidad. No solo se trata de una simple palabra, sino de un símbolo de identidad y pertenencia que ha sido moldeado por las vicisitudes del tiempo.

La riqueza de Aragonés no radica únicamente en su origen etimológico, sino en la forma en que ha evolucionado y se ha adaptado a lo largo de los siglos. Es un reflejo de la diversidad cultural y lingüística que ha caracterizado a las sociedades humanas, mostrando las influencias de distintas tradiciones y migraciones en su significado y pronunciación.

Cada vez que pronunciamos Aragonés, estamos haciendo eco de un pasado lleno de historias y experiencias que se entrelazan en un mosaico cultural único. Es por eso que es imprescindible no solo conocer su etimología, sino también comprender su contexto cultural y geográfico para apreciar plenamente su significado.

En un mundo cada vez más interconectado, es importante recordar que Aragonés no es solo una palabra, es un puente que nos conecta con nuestras raíces y con las historias de aquellos que vinieron antes que nosotros. Su valor va más allá de su definición objetiva, es un recordatorio de la complejidad y la riqueza de la experiencia humana.

Distribución Geográfica: descubre el origen ancestral de Aragonés

Explorar el origen geográfico del apellido Aragonés nos permite sumergirnos en la historia y comprender mejor las raíces familiares. Observar la distribución actual de personas con el apellido Aragonés nos brinda pistas sobre la migración y asentamiento de comunidades a lo largo de los siglos. Si Aragonés es común en ciertas regiones, es posible que tenga una conexión arraigada con dichos lugares. Por otro lado, la escasa presencia de Aragonés en una región puede indicar que su origen se encuentra en otro lugar, y que su presencia actual es resultado de desplazamientos más recientes.

Explorando las raíces del apellido Aragonés desde una perspectiva histórica y cultural

Sumergirse en el contexto histórico y cultural de los orígenes del apellido Aragonés puede revelar fascinantes claves sobre la vida cotidiana, la organización social y los eventos relevantes de aquella época. Aragonés es un apellido que, al igual que muchos otros, surge como una herramienta para diferenciar y reconocer a las personas de manera más precisa. No obstante, es la motivación detrás de esta necesidad la que nos proporciona pistas fundamentales sobre los orígenes de Aragonés.

No es lo mismo que Aragonés haya surgido como una manera de distinguir a una familia aristocrática, para preservar y asegurar su herencia, que su origen esté relacionado con cuestiones fiscales o legales. En este sentido, los orígenes de los apellidos han experimentado diversas historias y transformaciones en cada sociedad, y el surgimiento de Aragonés revela el contexto histórico y social en el cual se gestó.

Investigación del origen de Aragonés

La búsqueda del origen del apellido Aragonés puede ser un proceso fascinante que involucra la exploración de diversos recursos y fuentes de información. Desde la revisión de antiguos textos y documentos históricos hasta el análisis de bases de datos genealógicas y estudios etimológicos, cada paso en esta investigación puede revelar intrigantes detalles sobre los orígenes y la evolución del apellido Aragonés.

Los censos, registros parroquiales y documentos legales son como puertas que se abren hacia el pasado, ofreciendo pistas valiosas sobre la primera vez que se mencionó el apellido Aragonés y cómo ha ido transformándose a lo largo de la historia. De igual manera, los avances en estudios genéticos y genealogía genética han permitido una nueva dimensión en la investigación de apellidos, proporcionando una visión más completa sobre la herencia y las conexiones familiares que se han transmitido a lo largo de las generaciones.

Motivos para descubrir la historia de Aragonés

Explorar el origen del apellido Aragonés puede despertar curiosidad y ofrecer una conexión con nuestras raíces familiares. Muchas personas buscan entender su historia familiar y conocer de dónde proviene su linaje. Además, investigar el significado y la procedencia de un apellido puede brindar una sensación de identidad y pertenencia.

La importancia de la conexión familiar y el sentido de identidad con Aragonés

Explorar las raíces familiares de Aragonés

Sumergirse en la historia detrás del apellido Aragonés puede ser una experiencia enriquecedora y reveladora. Conocer de dónde provienen nuestros antepasados nos permite establecer una conexión más profunda con nuestra historia familiar y comprender cómo ha moldeado nuestra identidad y valores actuales.

Exploración de la identidad individual

Sumergirse en el significado y el contexto de Aragonés puede ser una experiencia enriquecedora que fortalece la conexión de una persona con su apellido Aragonés. Esto le brinda una perspectiva más profunda de su historia familiar, aumentando su sentido de pertenencia y autoconocimiento.

Explorar la raíz de Aragonés es desentrañar el pasado y las tradiciones

Análisis profundo de la inmigración y los cambios socioculturales

Sumergirse en la historia de los apellidos como Aragonés, incluso si no son los nuestros, puede revelar pistas sobre desplazamientos migratorios, transformaciones en la sociedad y la dispersión de grupos étnicos a lo largo de la historia y en diferentes territorios.

Valoración de la pluralidad cultural

Indagar en el significado de los apellidos como Aragonés promueve una valoración por la variedad y multiplicidad de culturas y costumbres que integran la sociedad en la que el apellido Aragonés ha surgido, ha crecido y sigue siendo relevante en el presente.

Intercambio con individuos con el mismo apellido Aragonés

Forjando lazos de comunidad

Al descubrir la coincidencia del apellido Aragonés con otros, se abre la puerta para establecer conexiones significativas y crear redes de apoyo basadas en lazos familiares o históricos compartidos.

Apoyo mutuo en el estudio de raíces familiares

Las personas interesadas en la historia del apellido Aragonés tienen la oportunidad de unirse para colaborar en investigaciones genealógicas. Compartir descubrimientos y recursos es clave para enriquecer el conocimiento sobre nuestra herencia familiar.

Interés particular y aprendizaje

Exploración de la genealogía de Aragonés

Indagar sobre el linaje del apellido Aragonés puede ser motivado por la curiosidad personal, una necesidad de comprender mejor nuestra propia historia y la de los demás.

Explorando el pasado familiar

Sumergirse en el misterio que envuelve al apellido Aragonés puede despertar la curiosidad y la sed de conocimiento, llevando a desarrollar nuevas habilidades de investigación y análisis. La búsqueda a través de archivos históricos, investigaciones genealógicas y análisis etimológicos puede abrir un mundo de posibilidades y de descubrimientos fascinantes.

Exploración y conservación de la herencia cultural de Aragonés

Registro de la riqueza cultural familiar

Indagar y recopilar la historia y tradiciones que rodean el linaje del apellido Aragonés es fundamental para mantener viva la herencia familiar, permitiendo que las generaciones venideras conozcan sus raíces y legados.

Descubrimiento de nuevos datos históricos

Explorando a fondo la historia de Aragonés, las personas pueden aportar información relevante al conocimiento colectivo sobre el pasado, incluyendo aspectos de la vida cotidiana, innovaciones tecnológicas y conflictos políticos que han influenciado en la sociedad a lo largo del tiempo.

Explorando los orígenes de Aragonés

En términos generales, el fervor por descubrir el origen del apellido Aragonés se fundamenta en una mezcla de búsqueda íntima, vínculos con la herencia cultural e histórica, y el afán de comprender y conservar la herencia familiar de Aragonés. Este periplo de exploración no solo enriquece el entendimiento individual, sino que también aporta a una apreciación más profunda de la historia compartida de la humanidad.

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